Ayuda a sentir amor cuando lo único que se siente es envidia, celos, sospecha o venganza y se sufre por ello.

Atrapado en pensamientos de amor-odio. Rabietas en niños.

Problemas cardíacos, picores e inflamaciones irritativas, bronquitis, tabaquismo.

Permite ayudar a los demás sin imponerse, respetándolos y sin criticar.

Manipulación, personas absorbentes.

Diabetes. Estreñimiento. Retrasos mensuales.

Da la oportunidad de expresar sus emociones en lugar de esconderlas bajo una sonrisa.

Problemas de drogas o alcohol.

Sensación de opresión en el pecho.

Necesaria cuando somos demasiado exigentes con nosotros mismos. Para aquellas personas con tendencia a mostrarse como ejemplo para los demás. Les permite disfrutar mejor de lo que les rodea.

Auto-represión. Perfeccionismo.

Rigidez no inflamatoria, torceduras, anquilosis.

Útil cuando se sienten temores inexplicables, premoniciones.

Pesadillas, terrores nocturnos, hipocondría.

Aprehensión, presagios.

Da impulso para enfrentarse a los obstáculos cotidianos que parecen insuperables por falta de confianza (primeros pasos en niños, exámenes, entrevistas…)

Sentimiento de inferioridad, vergüenza.

Impotencia, embolias, accidentes cardiovasculares

Necesaria cuando la esperanza y la fe han desaparecido y se actúa sólo para complacer a los seres queridos.

Desconfianza, desesperanzados, depresión, insomnio.

Útil en enfermedades largas cuando no se ve salida, dolor de cabeza, sinusitis.

Permite elegir entre varias opciones cuando la vocación es dudosa y las ambiciones altas.

Insatisfacción por vocación dudosa.

Problemas en región lumbar, problemas de menopausia y vesícula.

Permite elegir entre varias opciones cuando la vocación es dudosa y las ambiciones altas.

Insatisfacción por vocación dudosa.

Problemas en región lumbar, problemas de menopausia y vesícula.

Permite elegir entre varias opciones cuando la vocación es dudosa y las ambiciones altas.

Insatisfacción por vocación dudosa.

Problemas en región lumbar, problemas de menopausia y vesícula.

Relaja la mente cuando ideas o imágenes indeseables y reiteradas no dejan lugar a ningún otro

pensamiento.

Insomnio, tortura mental.

Enfermedades crónicas, estornudos continuos, tics, taquicardia, hipo, tartamudez.

Ayuda a seguir luchando cuando sólo queda angustia y desesperanza tras un largo período de dolor.

Depresión por duelo, angustia.

Enfermedades crónicas

Para quienes les resulta difícil no preocuparse por los demás en exceso.

Con frecuencia han dejado de preocuparse por sí mismos.

Ansiedad, miedos de los padres por sus hijos.

Problemas de lactancia. Insomnio.

Libera de las ataduras cuando las relaciones se han convertido en sometimiento, y no se les

permite expresarse.

Víctimas de maltratos. Síndrome de abstinencia (alcohol, droga, tabaco)

Debilidad física, problemas circulatorios, varices.

Relaja la mente cuando uno cree perder la razón o teme hacer cosas terribles (temblores

incontrolables, impulsos violentos, intentos de suicidio, agresividad…)

Miedo a volverse loco. Pesadillas.

Eneuresis, tics, Parkinson, Alzheimer, incontinencia de esfínteres.

Permite escucharse a uno mismo sin la necesidad de pedir consejos una y otra vez.

Falta de confianza en el propio criterio.

Sinusitis, catarros, indigestión, dolores reumáticos.

Conecta a uno mismo con la realidad dejando a un lado las fantasías y los ideales.

Falta de atención. Persona soñadora. Niños somnolientos.

Apatía, accidentes por falta de atención.

Da fuerza para superar los golpes de la vida que provocan un choque emocional, como noticias

desagradables, accidentes, duelos…

Shock emocional.

Accidentes, úlceras, crisis cardíacas, tensión nerviosa.

Anima cuando se flaquea por pequeños contratiempos en procesos que evolucionan de forma

satisfactoria. (Temor a una recaída, depresión post-operatoria, post-parto)

Depresión. Duda de uno mismo.

Dolores digestivos, flatulencia, diarrea, estreñimiento.

Desarrolla la confianza en la capacidad de los demás y disminuye la tendencia a criticarlos de

forma destructiva.

Intolerancia, crítica, arrogancia.

Bronquitis, recaídas de enfermedades.

Da valor en momentos de pánico o descontrol.

Terror, pánico, mente en blanco, bloqueos en exámenes, pesadillas.

Sudoración, piernas cansadas, mareos, epilepsia, flatulencia, irritación de pies, neumonía.

Aumenta la vitalidad en épocas de cansancio mental, cuando la carga cotidiana parece superarnos.

Aburrimiento, cansancio mental.

Varices, dificultad de estar de pie, debilitamiento físico puntual (rodillas, vista, estómago),

tratamiento de rehabilitación de alguna extremidad, dolores reumáticos.

Permite reflexionar antes de tomar una decisión y ser paciente con los demás.

Irritabilidad, berrinche.

Problemas de piel, irritación cutánea.

Para que el pasado no impida vivir el presente.

Nostalgia, depresión.

Enfermedades congénitas, estreñimiento.

Libera de la sensación interna de suciedad e impurezas.

Manías de limpieza.

Problemas de piel, efectos desagradables de la quimioterapia, erupciones cutáneas, alergias.

Equilibra los miedos cuando se conoce su origen.

Timidez, miedos cotidianos, miedo a la oscuridad en niños y bebés.

Trastornos del apetito, catarros crónicos, eneuresis, sueño pesado, varices.

Saca de la negrura de la depresión profunda y súbita, permite recuperar la alegría.

Depresión sin razón aparente.

Anemia, cistitis, estreñimiento, lumbago, dolor de espalda.

Necesario en momentos de cambio para aceptar las nuevas situaciones.

Necesidad de protección, adolescencia, andropausia, menopausia.

Dentición, diabetes, infecciones.

Permite recuperar las fuerzas en épocas de agotamiento físico y mental.

Cansancio.

Cansancio en cambios estacionales.

Genera fuerzas en momentos de flaqueza física y mental en situación de máxima responsabilidad.

Abrumado por las responsabilidades.

Cólicos renales.

Elimina los sentimientos de culpa que torturan la mente.

Auto-reproches.

Dolor de espalda dorsal y lumbar.

Da la oportunidad de concederse una tregua sin necesidad de enfermar.

Estrés de rendimiento permanente.

Embolias, infartos, hernias discales.

Imprescindible en épocas de apatía y desgana para recuperar las ilusiones.

Inercia, apatía.

Falta de reacción del organismo, músculos atrofiados, impotencia.

Permite aceptar los reveses de la vida sin resentimientos y recobrar el interés por las cosas.

Irritación, amargura.

Artrosis, artritis.

Facilita la elección entre dos opciones.

Confusión mental.

Estados de ánimos cambiantes, dolores menstruales, mareos.

Aumenta la auto-confianza y vuelve innecesario convencer a los demás.

Idealismo, fanatismo, sobre-entusiasmo, rigidez, niños inquietos.

Inflamaciones agudas. Anti-inflamatoria y relajante.

Nos posiciona en la perspectiva de la otra persona, aumentando así la flexibilidad de nuestra

óptica.

Tirano, niños dictatoriales.

Dolor de espalda, pinzamientos cervicales, ciática, hombro doloroso, inflamación aguda: otitis,

herpes, muelas…

Facilita la colaboración grupal cuando se tiene tendencia a aislarse.

Aislamiento social.

Pérdida visual o auditiva, esclerosis múltiple.